Te dejo trece preguntas que podrían ayudarte a elegir de mejor manera a tu socio.
Junto a la respuesta te dejo un link con una explicación más amplia.
¿Por qué quieres poner el negocio? más...
¿Para qué necesitas el dinero que obtengamos del negocio? más...
¿Cuántas horas diarias vas a aportar al negocio? más...
¿Estás dispuesto a trabajar sábados y domingos (todos los sábados y domingos)? más...
¿Tienes alguna responsabilidad que requiere de tu tiempo, (Congregaciones, reuniones, junta de vecinos)? más...
¿Cuánto dinero estás pensando que sea tu salario inicial y por cuánto tiempo? más...
¿Tienes alguna otra fuente de ingresos? ¿Cuál? más...
¿Has tomado un curso de, o sabes de Contabilidad o Finanzas? más...
¿Qué vas a aportar al negocio? más...
Si tuviéramos que cerrar el negocio, ¿qué perderías? más...
¿Quién depende de ti económicamente? más...
¿Tienes gastos mensuales al menos por seis meses? ¿Cuáles y cuánto? más...
¿Has puesto otros negocios? (ya sea que hayan funcionado o no) más...
1.-¿Por qué quieres poner el negocio?
Es fundamental saber la razón principal por la que se quiere poner el negocio. Las decisiones que vendrán se van a tomar con base a las necesidades de los dueños. Muchas veces se olvidan de lo más fundamental. Las empresas son dirigidas por personas. Con necesidades, con sentimientos, con frustraciones. Con sueños. Con deseos.
Es necesario ser completamente sinceros con esta pregunta. ¿Por qué quieren poner el negocio? Lo creas o no, existen muchas razones por las que la gente pone negocios, aparte del dinero. Hay gente que, en verdad, tienen una obsesión con los negocios, les apasiona, no les importa trabajar todos los días y en todo momento están pensando en nuevos negocios o en cómo mejorar el negocio que recién abrieron. Así como hay gente que le gustan los autos, el futbol, la fiesta. Existen personas que tienen un vicio con los negocios, y no les interesa ser el millonario codiciado de la zona, simplemente quieren tener negocios y ver cómo se comporta el mercado, ofrecer productos que no existen en esa zona, nueva comida, ropa diferente, etc.
Otras personas quieren poner un negocio porque sus papás tienen un negocio y es la tradición familiar.
Otros porque ya no quieren verle la cara al jefe y están hartos de tanta injusticia capitalista.
Otros porque quieren poder llevar a su perro al trabajo y la única manera es tener una empresa que sea pet friendly
Otros quieren poner un negocio por que las jornadas laborales son extensas en su actual trabajo entonces una opción de escape es poner un negocio.
Conocer la verdadera razón por la cual su socio o socios quieren poner el negocio es fundamental. Los va a poner en un contexto general de lo que quiere cada persona. Por ejemplo, si una persona quiere poner un negocio porque simplemente ya no quiere seguirle viendo la cara a su jefe. Y se asocia con una persona que se apasiona por los negocios. Cuando se vea la dirección que va a tomar la empresa pudiera pasar que uno quiera solamente generar el ingreso que ganaba en su trabajo anterior, no más no menos. Y tal vez la otra persona está pensando en poner franquicias por toda América. Las visiones son muy diferentes y al momento de tomar decisiones van a discutir en dos niveles de entendimiento completamente diferentes.
2.- ¿Para qué necesitas el dinero que salga del negocio?
Si una persona quiere poner un negocio porque lo acaban de correr y necesita tener una fuente de ingreso y se asocia con una persona que quiere poner su segunda empresa: Las decisiones van a ser tomadas desde dos puntos de vista completamente diferente. Mientras que el primero va a querer sacar dinero lo más pronto posible el segundo posiblemente pueda optar por querer reinvertir todas las utilidades para hacer crecer el negocio más rápido.
Existen veces en que las personas que tienen su primer negocio no saben diferenciar del dinero personal al dinero que es de la empresa. El dinero que se genera dentro de la empresa o por la empresa, es de la empresa, no es de los dueños. De los dueños son las utilidades (que ya veremos más adelante) o el salario (en caso de que se contraten en la misma empresa), todo lo demás es propiedad de la empresa.
Existen personas que les apasiona viajar, y cómo está de moda eso en estos días. Pero tenemos dos problemas graves aquí:
Generalmente las personas que quieren un negocio porque quieren tener dinero para viajar, no esperan a que madure el negocio y utilizan las primeras utilidades para poder realizar los viajes.
No están pensando en su futuro, y me refiero realmente al futuro, a los 60 años. Su retiro, y eso pasa por que actualmente estamos rodeados de información falsa o a medias. Nos han hecho creer que las personas de negocios son gente que se la pasa viajando y disfrutando de la vida, y no dudo que existan personas así, pero para poder llegar a tener eso, se requiere de muchos años de esfuerzo, de sacrificios. Si es que lo logras. Porque debes tomar en cuenta que el 80% de las empresas fracasan en sus primeros dos años.
3.- ¿Cuántas horas diarias vas a aportar al negocio?
Una de las preguntas fundamentales es saber el tiempo que se le dedicará al negocio pues evitará entrar en una discusión de quién está trabajando más. No quiere decir que la calidad del trabajo esté relacionada con la cantidad de horas que dedicas al negocio, pero en algunas ocasiones, las horas que se dedican incluso sin hacer “nada” son fundamentales para la empresa.
Por ejemplo, si tienes que abrir las puertas de tu negocio para poder vender. Tal vez un sábado no tengas muchas tareas, pero abrir el negocio es fundamental y tal vez no estás haciendo "algo", pero dedicas esas horas al negocio, esas horas que no puedes dedicar a tu pareja o a tus hijos, a tus amigos, a tu perro, qué se yo.
Otra razón importante es, las dos personas estarán en el entendido de cuántas horas reales dedicarán al negocio, puede que un socio pueda dedicarle solamente 20 horas porque tiene otro negocio, y el otro socio tiene disponibilidad de tiempo y puede aportar 40 horas, sería tonto querer que los dos aporten las mismas 40 horas, o quitarle empuje a la empresa haciendo que los dos trabajen solamente 20 horas. Ya veremos este tema a detalle cuando veamos “Diferencia entre dueño y empleado”
4.-¿Estás dispuesto a trabajar sábados y domingos (todos los sábados y domingos)?
La pregunta de por sí es obvia, pero es necesaria. Existen giros de negocio que son para trabajar viernes sábados y domingos (un restaurante por ejemplo) si la gente no está dispuesta a trabajar TODOS los sábados y domingos, entonces no es una buena idea poner un restaurante con ellos. Al menos no al principio, que el restaurante va a requerir de toda tu atención, de tu entrega, de tu improvisación y de resolver problemas en ese mismo instante.
Existen también giros en los cuales ir a conseguir clientes potenciales los fines de semana es vital para la empresa. Imagínate que venden, no sé, accesorios para perritos, al principio van a tener que ir a las ferias, a los parques donde la gente pasea a los perros, a los lugares de cafés para perros, etc. Van a tener que poner su puesto para explicar el producto y demás, pero si tu socio o tú no están dispuestos a trabajar temprano los sábados y domingos, van a tener unas discusiones para el recuerdo. Cuando uno de los socios quiera ir a ofrecer el producto para poder atraer clientes y el otro diga que el sábado ya tenía planes de ir con la novia, el novio, el papá a desayunar o a la carne asada del tío. Son discusiones que van desgastando la sociedad y después es muy difícil rescatarla.
Por esto es importante saber si tus socios o tú están dispuestos a trabajar todos los sábados y domingos.
5.-¿Tienes alguna responsabilidad que requiere de tu tiempo, (Congregaciones, reuniones, junta de vecinos)?
En mi primer negocio me asocié con mis mejores amigos y un primo. ¿Qué podría resultar mal? La mayoría de las cosas. Y realmente el problema no fue el producto. Fue la sociedad, no estábamos en el mismo entendido, ni de tiempo, ni de esfuerzo, ni de visión, ni de ambición. Todos teníamos en ese tiempo responsabilidades diferentes, que en ese momento no pude entenderlas. Uno de ellos había terminado de estudiar, graduándose de ingeniero (tenía la presión de que sus amigos ya estaban empezándose a contratar y él estaba sin ganar un peso, trabajando en un local pequeño y definitivamente no estaba trabajando para lo que había estudiado), otro estaba con toda la ilusión de poder poner un negocio, y toda la semana podía trabajar desde las 8 de la mañana hasta las 8 de la noche, otro había entrado a una nueva religión y le requería que fuera, no recuerdo bien pero dos o tres veces a la semana, uno de esos días los domingos, y algunas veces miércoles o viernes si no mal recuerdo. Yo seguía estudiando así que solamente podía estar ahí después de 1:30 de la tarde.
Todos nos fuimos enterando de nuestras responsabilidades durante el tiempo del negocio. Imagínense las discusiones del chico que estaba desde las ocho y que pedía un tiempo de descanso y el chico que tenía que ir a lo de su religión. Bien recuerdo que una de esas discusiones fue porque al chico lo habían elegido para hacer un papel en la obra, entonces a parte de los días que ya sabíamos que no podía ir, ahora necesitaba más días para ir a ensayar. Durante esa época no supe cómo manejar la situación y en cierto momento se volvió hasta vengativo por parte del grupo, los días que él no podría cubrir se los dejábamos deliberadamente, para poder hacer hincapié en “su falta de compromiso”, que bien ahora entiendo, simplemente estábamos en diferentes niveles de entendimiento, nadie mejor, simplemente diferentes. Ya sabíamos que iba a empezar la discusión, pero lo que queríamos ver era el compromiso con nosotros. No entendí, en ese tiempo, que hay cosas más importantes que un negocio. Terminamos de la manera en que debía terminar, el chico decidió renunciar a nuestro equipo. No nos hablamos por un buen tiempo y ya nada volvió a ser igual.
Entender que para otras personas hay cosas más importantes que el negocio es vital. Y entenderlo antes de ponerlo en marcha, es mucho mejor. Si los domingos en la mañana son los desayunos con la familia y tú o tu socio no están dispuestos a dejarlos, bueno, es mejor saberlo desde el principio. Por ejemplo, la gente que trabaja conmigo sabe, que los sábados en la mañana no se ponen juntas ni eventos a menos que sean muy importantes. Porque es cuando voy a jugar futbol, y es tiempo para mí. Pero ya lo sabemos, y si la junta puede ser sábado en la tarde, viernes muy noche o domingo, yo no tengo problema.
6.-¿Cuánto dinero estás pensando que sea tu salario inicial y por cuánto tiempo?
Los números van a evitar que tengamos peleas constantes, una parte del tiempo de las discusiones entre socios son referente al dinero. Si tenemos claro lo que se va a pagar de salario, entonces tendremos clara la inversión que se necesita para poder abrir un negocio.
Para entender mejor este punto vamos a poner un ejemplo. Son dos socios. Bruno y Julieta, los cuales están a punto de abrir su agencia de publicidad digital (un boom) para lo cual se dan cuenta que necesitan dos computadoras y algunos muebles para abrir su agencia, lo que saldría en un costo de $27,000.00 en total. Entonces van muy animados a comprar las cosas, pero ahora se dan cuenta que necesitan rentar un lugar, y aparte tener internet y no sólo eso, sino que también necesitan pagar la electricidad cada dos meses. Calculan y entre el internet la renta y la electricidad suman un gasto mensual de $5,900.00 Entonces están tomando en cuenta que su inversión inicial es de (27,000 más $5,900.00 = $32,900.00) Y ahora sí listos para abrir... Muy mala idea.
Hay varios errores de cálculo ahí y estamos tomando lo más simple pero el punto es que entiendan cómo funcionaría el dinero. Porque generalmente las personas suelen olvidar anotar su salario en parte de la inversión. Sinceramente no sé por qué lo hacen. Te explico mejor, si ustedes no anotan dentro de la inversión su salario, cada vez que alguien atraviese la puerta buscando sus servicios, en lugar de ver a esa persona como todo mundo debería de verla, “como una persona” ustedes verán un saco de dinero que brinca hacia ustedes.
Imagínense, fin de mes no tienen para pagar la renta, no tienen salario y entonces se acerca una persona a pedirles sus servicios, ustedes tratarán de venderle lo más que se pueda, y se pierde el enfoque. Cosa contraria a que si ustedes ya supieran que tienen la renta y su salario por los primeros seis meses (al menos), de esa manera a la hora que entre una persona buscando sus servicios ustedes la verán como una persona y lo que querrán hacer es ayudarla independientemente del dinero, que claro que se le tiene que vender, pero su venta será enfocada a solucionar los problemas del cliente y no tus problemas financieros. Así, tomando el caso anterior supongamos que Bruno y Julieta deciden que su salario inicial será de unos $10,000.00 mensuales, eso quiere decir que son $20,000 pesos al mes por los dos, por seis meses serán $120,000 que entrarán dentro de la inversión inicial.
Si están dispuestos a no tener un salario, entonces también deben anotarlo en un apartado porque cuando tengan que dejar el puesto y contratar a alguien no sufran con la parte de los gastos. Veremos está parte más a detalle dentro del tema "Dar nombre a tus Gastos"
7.-¿Tienes alguna otra fuente de ingresos? ¿Cuál?
Ok, para qué sirve esta pregunta sino para poder hablar del mismo tema cuando estemos hablando de dinero. Se vuelve un constante reproche el “es que como tú ganas por otro lado no te interesa esto” o la frase de “como tú ganas por otro lado por eso no quieres que nos subamos el sueldo” y muchas otras frases que se me vienen a la mente. En realidad, muchos de estos reclamos empiezan por no haber puesto las cosas claras desde el principio y por entender de manera equivocada lo que son las utilidades contra el salario.
El que una persona tenga una o múltiples fuentes de ingreso no debería ser tema de reproches y aunque suene absurdo, créanme que sucede, y con más frecuencia de lo que imaginan. Realmente no nos debería importar si la otra persona tiene otro ingreso siempre y cuando se respete el acuerdo que se hizo al inicio de la sociedad. Es por eso que todas estas preguntas nos darán un poco de información con respecto al lugar donde la otra persona está parada. Es obvio que una persona que tiene otra fuente de ingresos estará menos preocupada que la persona que es su única fuente de ingresos. Pero recuerdan que les dije que pusieran su salario dentro de la inversión. Bueno es para evitar esto. Y conocer si hay otra fuente de ingreso nos dice además si realmente tendrá el tiempo que dice que tendrá para atender el negocio. Si, por ejemplo, dice que tiene un trabajo los fines de semana para sacar algo extra. Es muy probable que no pueda trabajar fines de semana para la nueva empresa. Pero saberlo desde antes nos evitará el estar tratando de hacer que deje esa fuente de ingresos por esta nueva aventura.
8.-¿Has tomado un curso de, o sabes de Contabilidad o Finanzas?
Bueno, es una pregunta vital. Si todos los socios ya tomaron un curso será mucho más fácil llegar a un acuerdo. Y si no, pues será el pretexto perfecto para poder iniciar un curso juntos que les ayude a encontrar de mejorar manera un punto de equilibrio entre ambas visiones del negocio.
Otro punto importante de saber finanzas administrativas es que te evita bastantes dolores de cabeza. Desde el dolor de cabeza al pensar que alguien, o todos en tu empresa te roban, hasta el de querer empezar a recortar gastos a diestra y siniestra porque no hay dinero en el banco.
Llegar a fin de mes y revisar los números puede ser depresivo. O engañosamente alentador. Porque de repente tienes mucho dinero en la cuenta de banco y te emocionas, pero no has revisado las cuentas por pagar y prácticamente a duras penas te alcanzará para pagar, digamos, la renta.
9.-¿Qué vas a aportar al negocio?
Antes de hacer una sociedad, es de suma importancia entender lo que cada socio aportará a la sociedad, estar consientes de si es una "aportación" o un "préstamo". Dependiendo de lo que cada uno aporte es el porcentaje que recibe cada participante en la sociedad (generalmente).
Un ejemplo sería si abren una panadería y uno de los socios dice "yo pongo mi carro y en ese hacemos las entregas" ... todo un tema que resolver, y hacerlo antes de poner el negocio te ayuda a solucionar problemas que aún no has tenido.
Esta pregunta te ayudará también a saber si la aportación será únicamente de dinero o también se aportará tiempo, activos (carro, muebles, libretas etc), conocimiento (know-how)...
10.-Si tuviéramos que cerrar el negocio, ¿qué perderías?
Esta pregunta es complementaria a la anterior. No solamente lo que aportas importa dentro de una sociedad, si bien esta pregunta no resuelve el porcentaje que debería tener cada participante, sí ayuda a entender de mejor manera la posición en que se encuentra cada participante.
Para entender de mejor manera este punto es mejor un ejemplo: imagínense que una persona sabe hacer helados muy ricos, pero no tiene dinero. Se encuentra con una persona que dice que quiere asociarse con él. Uno pone el conocimiento y el otro el dinero. Usualmente la gente diría pues 50/50 por que uno sin el otro no haría nada. Pero veamos lo siguiente, en caso de pérdida, el que puso el conocimiento ¿qué pierde? ¿y el qué puso el dinero?
Ahora tampoco crean que el uno sin el otro no haría nada. Por ejemplo, el que tiene dinero puede ir a una casa de inversión o a el banco para poner su dinero y obtener un rendimiento, mínimo, pero al fin un rendimiento. Sin embargo, el que sabe hacer helados no puede ir al banco a decir, yo sé hacer los mejores helados del mundo, ¿cuánto me dan de rendimiento por eso?
Y mucho menos estoy diciendo que no puedan poner un negocio juntos. pero hay maneras de resolver este dilema. (será en una siguiente entrada del blog)
11.-¿Quién depende económicamente de ti?
Entender las prioridades de la otra persona nos ayudará a decidir si queremos formar una sociedad o no. Si el negocio requiere de mucho viaje, de trabajar muy noche, de no tener un salario por varios meses… entonces elegir a alguien que tiene responsabilidades económicas será un peso que deben estar dispuestos a cargar y que pudiera resultar en peleas y distanciamiento. Y lo que empezó como algo increíble pudiera convertirse en la barda que no permitirá reuniones en navidad, visitas en los cumpleaños o silencios incómodos en las comidas.
12.-¿Tienes gastos mensuales al menos por seis meses? ¿Cuáles y cuánto?
Se que es una pregunta un poco invasiva, pero si es el negocio será la única fuente de ingresos entonces aclarar los gastos mensuales obligatorios es de suma importancia. Con estos gastos no nada más me refiero a los servicios de streaming, Netflix, Prime video o lo que gusten. Me refiero a el pago de un automóvil, o algún gasto que hayan hecho a meses sin o con intereses. Ropa, computadoras, viajes. Etcétera.
Esos compromisos económicos son prioritarios para el que contrajo la deuda. Los intereses te comen. Un día que no pagues y se empieza a desatar el infierno. Si alguno de los socios tiene una deuda así y empieza a tener dinero la empresa, va a querer solicitar un préstamo a la empresa para poder solventar su deuda y terminar de pagarla. Y si solamente son dos socios, si la otra persona no quiere, entonces es la malvada que no se tienta el corazón y solamente le importan los negocios. Si la empresa presta el dinero, y la persona que debe el dinero no paga en tiempo, ¿cómo le van a hacer para cobrarle?
13.-¿Has puesto otros negocios? (ya sea que hayan funcionado o no)
Generalmente las personas que han puesto un negocio y fracasaron suelen ser más precavidas en los siguientes negocios, tienen más experiencia y empiezan a elegir de mejor manera su equipo.
En México el fracaso no está bien visto, la gente que fracasa es un perdedor y tendrá esa etiqueta hasta que logre redimirse, si es que tiene el valor de volver a intentarlo después de la presión social. Y si encuentras a alguien que quiere volver a intentarlo deberías tomar en cuenta lo siguiente:
Las razones por las que cerró su negocio.
Si acepta su responsabilidad en la ruptura del negocio o cree que fueron causas externas las responsables de su fracaso.
Escucha con atención si creía en su producto o simplemente buscaba la manera de hacer dinero a costa de su producto.
Pregunta por la forma en que se manejaban las finanzas en su negocio.
Si leíste hasta acá, felicidades. Tal vez eres la primera persona.